Auditoría de Cortafuegos

Una configuración incorrecta del cortafuegos puede dejar abierta la puerta a amenazas internas y externas. Nuestra auditoría de cortafuegos está diseñada para ayudarte a evaluar la eficacia y solidez de las configuraciones aplicadas, identificar posibles errores y reforzar la protección perimetral de tu infraestructura.

Durante la auditoría, analizamos en detalle las reglas de filtrado, políticas de seguridad y accesos permitidos, para detectar configuraciones inconsistentes, reglas redundantes o excesivamente permisivas. Este análisis te permitirá mejorar el rendimiento del cortafuegos, asegurar un filtrado coherente con tus objetivos de seguridad y reducir la superficie de exposición frente a ataques.

Nuestro objetivo es ayudarte a optimizar la gestión del cortafuegos como elemento clave en la seguridad de red, con un enfoque técnico, detallado y adaptado a las particularidades de tu entorno.

Fases de la auditoría

La auditoría comienza con una reunión de kick-off, donde definimos contigo el alcance técnico, los objetivos, el cronograma de trabajo y los recursos implicados. Tras esta reunión, te entregamos una planificación detallada que describe cada fase y las actividades previstas.

La primera etapa consiste en recopilar información sobre el dispositivo firewall y su entorno operativo. Analizamos las versiones en uso, los puertos y servicios protegidos, las conexiones de red activas y la arquitectura general. Esta revisión permite entender cómo está integrado el cortafuegos dentro de la infraestructura y qué zonas requieren especial atención por su criticidad.

A continuación, realizamos un análisis técnico detallado de las configuraciones actuales. Se revisan las políticas de entrada y salida, los objetos y grupos definidos, las reglas NAT, las configuraciones de túneles VPN y los mecanismos de acceso remoto. Buscamos reglas obsoletas o innecesarias, errores en la segmentación del tráfico, y fallos en la protección de las interfaces administrativas.

Para finalizar, elaboramos un conjunto de recomendaciones específicas para fortalecer la seguridad del cortafuegos. Estas recomendaciones incluyen sugerencias para optimizar las políticas de filtrado, reforzar los accesos remotos, eliminar reglas innecesarias o mal definidas, y establecer buenas prácticas de gestión para el mantenimiento continuo del dispositivo.

La auditoría concluye con una presentación ejecutiva de resultados, orientada a perfiles no técnicos. En esta sesión exponemos las conclusiones de forma clara y sencilla, entregando un informe ejecutivo que sirva como guía para la toma de decisiones. Una vez implementadas las mejoras, realizamos una auditoría de revisión para verificar que las recomendaciones han sido subsanadas, y reflejamos el nuevo estado de la seguridad en un informe actualizado.

Pruebas y herramientas

Esta auditoría utiliza una revisión técnica manual realizada por el auditor. Estas auditorías se centran en examinar configuraciones, evaluar políticas de permisos, verificar el cumplimiento de buenas prácticas y detectar errores comunes que puedan exponer la infraestructura o los datos corporativos. Este enfoque minucioso y experto permite identificar riesgos de seguridad ocultos y fortalecer la postura de ciberseguridad de la organización sin necesidad de herramientas especializadas.

El pentesting de cortafuegos es una auditoría de seguridad centrada en revisar la configuración de este dispositivo clave en la protección perimetral de la red. El objetivo es identificar reglas innecesarias, políticas demasiado permisivas o errores de configuración que puedan facilitar accesos no autorizados o reducir la eficacia del filtrado.

En un pentesting de cortafuegos se detectan configuraciones inconsistentes, reglas obsoletas o redundantes, accesos remotos inseguros, segmentaciones mal definidas, fallos en túneles VPN, políticas de entrada y salida excesivamente abiertas y errores en la protección de las interfaces administrativas.

Porque el cortafuegos es uno de los elementos más críticos en la seguridad de red. Una configuración incorrecta puede dejar expuestos servicios internos, facilitar accesos no autorizados o permitir movimientos laterales en caso de intrusión. El pentesting de cortafuegos permite reforzar la protección perimetral, optimizar las políticas y garantizar que las reglas aplicadas cumplen con los objetivos de seguridad de la organización.

Se recomienda realizar un pentesting de cortafuegos al menos una vez al año, tras cambios importantes en la red o después de aplicar nuevas configuraciones en el dispositivo. En organizaciones críticas, conviene revisarlo con mayor frecuencia para asegurar que el cortafuegos sigue alineado con la estrategia de seguridad.

En PentestingTeam el pentesting de cortafuegos tiene un precio estándar de 450 €. Para dispositivos más complejos, con múltiples políticas, reglas y configuraciones avanzadas, se estudia cada caso de forma personalizada para ajustar el presupuesto al alcance real.

Un pentesting de cortafuegos suele completarse en una semana. En la mayoría de los casos no es necesario ampliar más tiempo, salvo en infraestructuras muy grandes o con múltiples dispositivos interconectados.

No, ya que se trata de una revisión de configuración y no de un ataque. En PentestingTeam realizamos un análisis técnico detallado de reglas, políticas y accesos de forma no intrusiva, por lo que el proceso no afecta al funcionamiento del dispositivo ni a la red.